Federico
Fellini, de lejos uno de los mejores directores italianos, tuvo una gran
transición en cuestiones de estilo. Este último, fue cambiando de la misma
manera en que pasaban los años, realizaba nuevas películas los tiempos
cambiaban y con ellos su propia mente.
En
un principio, el neorrealismo italiano fue una de las principales
características que definió al estilo de Fellini, al igual que a otros
directores también neorrealistas. El neorrealismo italiano fue caracterizado por ser un periodo
de tiempo entre 1943 y 1955, en el cual las películas rodaban en locaciones
reales, es decir en las mismas calles de
las varias provincias italianas y se utilizaban actores no profesionales. Por
esto mismo, se mostraba el actual contexto social en el cual vivían los
italianos como personas individuales y también reproducir la relación entre estos y
el entorno. Logrando, de esta manera, captar los cambios y transiciones de la
mente de aquellas personas, en especial, la vida cotidiana de aquellos que eran
trabajadores o indigentes, empobrecidos por la guerra. Básicamente, mostrar la
realidad italiana durante la guerra europea que se estaba llevando a cabo. Este
estilo neorrealista se puede ver claramente reflejado en la película La Strada. Por otro lado,
algo que compartió junto con otros directores neorrealistas fue el hecho de
colocar a las mujeres como protagonistas principales. Claro ejemplo de ello es
la película La Strada ,
donde el personaje principal es Gelsomina.
Entre
otras características, se puede afirmar que Fellini se esforzó por tener un
estilo propio. El director buscó crear personajes unidimensionales, fuera de lo
real, exagerados y definidos completamente por el ambiente o el estatus social.
Por consiguiente, decidió que los personajes se vistan de una manera
extravagante y diferente de cómo lo haría una persona normal. Así mismo, los
personajes logren mantener la misma vestimenta por el resto de la película. Por
otro lado, se observa que las películas tienen el estilo propio de una fábula,
ya que como se observa en La
Strada , existen figuras simbólicas y la estructura de la
narración es como una fábula.
En el ámbito de lo erótico, Fellini en sus películas, por ejemplo, casanova manifiesta el erotismo mediante la actuación de sus personajes. Escenas extrañas y extravagantes mezclando la realidad con la magia y lo erótico.
Con
respecto a la religión, en un comienzo, Fellini suele ponerle un profundo
énfasis a la cristiandad. En base a ello, él muestra un mundo sin amor, llenos
de personas que explotan a otras, pero de pronto, hay un personaje puro e
inocente que no hace nada más que dar amo y vivir por amor.
Conforme
fue pasando el tiempo, por los años 50,
las películas de Fellini se habían alejado del estilo neorrealista y
Fellini había buscando nuevas formas artísticas para contar los problemas
sociales que existían en Italia. Es así como a Fellini se le ocurrió agregarle
un estilo poético y lírico a cada una de las imágenes de las escenas de las
películas.
Finalmente,
lo que se puede ver en las últimas películas es un mundo perdido donde las
personas son corruptas, materialistas y derrochadoras. Sin embargo, a
diferencia de las primeras películas, donde había personas malas pero también
personas buenas, dentro de las últimas películas realizadas, ya no existe nadie bueno, ni si quiera la
iglesia, ya no hay un Dios ni esperanza de vida. Esto último, se ve claramente
reflejado en La Dolce
Vita. Una película donde se ve claramente como la sociedad ha
caído en el materialismo, la lujuria y la corrupción, y donde los personajes
evitan el descubrimiento de sus verdaderas caras y pensamientos.
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